Experimentación como sinónimo de tortura
¿Cuándo fue la última vez que el hombre vio como igual a los animales? Tal parece ser que en el momento en que pudo erguirse, pararse en dos patas, ver por encima de las flores y el pasto y dejar sus manos libres, comenzó un proceso de emancipación en el cual no solo las dos manos adquirieron destreza; comprendió de forma muy empírica, claro está, el uso y aprovechamiento de los recursos que la naturaleza tenía a su alrededor.
Aprendió a fabricar herramientas que le proporcionaron comida y abrigo, pues desarrolló estas y comenzó a cazar. ¿Sería este el momento en que el mono-hombre se apartó de la naturaleza? ¿Sería este el instante en que descubrió el poder?.
Sin siquiera tener el significado claro, las herramientas que tenían en sus manos le dieron la confianza necesaria para aprovechar todo lo que su mirada abarcaba. Era un horizonte amplio y una gran variedad de animales podían ser utilizados, entonces todos tenían cualidades que podían ser “aprovechadas”… El hombre se convirtió en el peor depredador que el planeta tierra en siglos pudiera tener.
Así pues, este como recurso de aprendizaje recurre a millones de animales para fines de investigación a diario. Infinitos son los laboratorios, facultades de medicina, granjas, instalaciones comerciales, etc., que inyectan, untan, cortan, viviseccionan, paralizan, realizan descargas eléctricas, los privan de alimento y líquido y, en fin, cualquier tipo de ejercicio (prácticas comerciales, estudio, etc.) que sirva de beneficio para el mono-hombre.
Ahora pues, existen compañías multinacionales que argumentan que el uso de animales es necesario y que de ninguna otra manera se podría haber avanzado en la medicina como hasta ahora. Por otro lado, defensores de derechos de animales argumentan y demuestran que existen alternativas distintas que permiten dicha evolución, respetando a los animales como seres vivos, que sienten y merecen respeto.
Se ha declarado el 24 de abril como el Día Internacional del Animal de Laboratorio, pues millones mueren sin poder negarse a “servir a una causa”. Este día en especial se conmemoran las condiciones de angustia y las distintas humillaciones a las que son expuestos.
En otras palabras, si los animales son tan iguales a nosotros para poder servir de experimento en productos para nuestro beneficio, ¿por qué no reciben un trato digno e igual, si la tecnología ha avanzado a pasos agigantados? ¿por qué no han encontrado alternativas distintas a la “experimentación animal” como prefieren mencionarlo algunos científicos en vez de utilizar procesos de tortura?
Parece ser que al mono-hombre se le olvidaron sus raíces… que en la naturaleza se atribuyó una importancia falsa.
